Una vez llega el momento de cambiar tus ventanas, bien sea en tu oficina o en tu hogar, hay varias preguntas que es necesario responder. La primera suele ser el tipo de ventana a elegir, de PVC o de aluminio. Una vez hemos despejado esa incógnita, el tipo de apertura. Y lógicamente, una vez las cambiamos, uno de los objetivos debe ser mejorar la eficiencia energética. Y una vez instaladas, te preguntarás la mejor forma de limpiarlas. Respondemos a estas preguntas frecuentes a la hora de cambiar tus ventanas.
¿Por qué elegir una ventana de PVC?
Las razones por las que decantarse por una ventana de PVC son muchas: conductividad térmica muy baja, tiempos menores de fabricación, relación calidad/precio, amplia gama de personalización en sus acabados, adaptabilidad a cualquier tipo de cierre y gasto menor de energía en su fabricación.
¿Por qué elegir una ventana de aluminio?
Las ventanas de aluminio son una opción muy flexible y efectiva para multitud de situaciones. Por un lado, permite instalar cualquier tipo de espesor de vidrio en ellos pudiendo potenciar el aislamiento térmico y acústico, y la seguridad en función de las necesidades del cliente. Por otro lado, la eficiencia energética de las ventanas de aluminio han mejorado considerablemente en los últimos años gracias a nuevas técnicas de fabricación; ofreciendo un ahorro de energía, una limitación de la condensación y un ahorro de la factura eléctrica debido al grado de aislamiento antes mencionado. Además, el nivel de personalización es casi infinito; ofreciendo distintos acabados y aperturas. Es la opción con mayor durabilidad debido a la dureza y flexibilidad del material.
¿Qué tipos de aperturas elegir según la ventana?
En MAHÍA ofrecemos diferentes tipos de aperturas para que se adapten a tus gustos y necesidades. Según el espacio disponible y otros aspectos prácticos y estéticos, puede compensar más un tipo de apertura u otro.
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Abatible: Las ventanas abatibles se abren girando sobre bisagras laterales como una puerta. Pueden abrirse hacia el interior o el exterior del edificio.
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Batiente: Las ventanas batientes son similares a las abatibles, pero se abren desde la parte superior o inferior, girando sobre bisagras horizontales.
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Corredera: Las ventanas correderas se abren deslizando un panel sobre otro en un plano horizontal.
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Oscilobatiente: Las ventanas oscilobatientes combinan las funciones de las ventanas abatibles y batientes, pudiendo abrirse tanto lateralmente como inclinadas desde la parte superior.
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Osciloparalela: Las ventanas osciloparalelas se deslizan y se inclinan hacia dentro, combinando características de las ventanas correderas y oscilobatientes.
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Pivotante: Las ventanas pivotantes giran alrededor de un eje central horizontal o vertical, permitiendo que la ventana gire completamente.
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Combinada: Las ventanas combinadas integran varios tipos de apertura en un solo marco, ofreciendo la máxima flexibilidad.
¿Cómo mejorar la eficiencia energética cambiando las ventanas?
Las ventanas modernas son entre dos y tres veces más eficientes que las antiguas. El hecho de disponer de ellas, puede suponer un aumento en la clase de eficiencia energética de un edificio. Reducen el ruido, optimizan la ventilación, aumentan la seguridad y aportan una mejora significativa con el uso de materiales reciclables y de baja emisión CO2. Con ellas, se reduce la huella de carbono según la normativa y recomendaciones de la UE.
¿Cómo limpiar las ventanas correctamente?
Para un correcto mantenimiento de las ventanas, es conveniente limpiarlas a fondo por dentro y por fuera cada dos meses aproximadamente. Es fundamental, en primer lugar, quitar el polvo con un paño seco para evitar rayar el material. Después se deben utilizar los productos adecuados para cada tipo de material, el vidrio, el PVC o el aluminio. Se recomienda empezar por el marco y en los cristales desde arriba hasta abajo.
¿Cómo reforzar la seguridad de las ventanas?
La seguridad en las ventanas ha avanzado considerablemente en los últimos años. Hay muchas soluciones efectivas para reforzar la seguridad de tu hogar u oficina. Desde rejas de metal, refuerzos para bisagras, barras laminadas hasta vidrios templados o blindados.
Ponte en contacto con nuestro equipo y valoraremos cuál es la mejor solución en función de tus necesidades.
